Perfil del niño de 5 años
Aspecto Físico
Tiene la posibilidad de correr y saltar en un solo pie, ya controla totalmente sus esfínteres, lo que le permite la independencia. Está bien maduro en el control motor.
Posee gran independencia y habilidad en sus movimientos. Domina el espacio total y parcial. Se desplaza con precisión en diferentes direcciones y con distintos ritmos. Maneja rectas, curvas y diagonales.
Reconoce su esquema corporal y sus articulaciones. La coordinación óculo-manual progresa lo suficiente como para permitirle un intenso dinamismo manual. Puede calcar, recortar, plegar, copiar grafismos (letra imprenta), escribir su nombre. Sus dibujos son ricos y se aproximan a la realidad. Trabaja en forma creativa con pintura, arcilla, bloques. Puede trabajar de acuerdo a un objetivo, y cumplirlo con un producto reconocible.
Es un explorador interesado y capaz de alejarse de la zona en que reside. Evita el peligro que pueden ofrecerle ciertos materiales. Está constreñido al espacio activo y posee una incipiente conciencia del espacio global.
Aspecto Emocional y Social
Es decidido, seguro de sí mismo, independiente en sus necesidades personales, más reservado, demuestra intencionalidad en sus realizaciones. Es serio, reposado, realista. Depende del adulto, pero también compite con él, buscando su error. Le agrada su supervisión y la solicita. Es servicial, afectuoso, comprensivo y conversador. Sus estados de ánimo son pasajeros y se repone rápidamente si éstos son malos. Puede controlar más su llanto.
Respeta las normas establecidas por el adulto y por el grupo, y se molesta muchísimo ante cualquier injusticia. Es responsable y le gusta cooperar, siendo capaz de cumplir con encargos que demandan tiempo y responsabilidad. Es perseverante, le gusta terminar lo que ha comenzado, en el mismo día, o en jornadas subsiguientes. Reconoce lo propio y lo ajeno, posee mucho amor propio y se esfuerza para superar dificultades; resuelve sin enojos, sus propias situaciones. Es capaz de ceder su lugar y de esperar su turno sin molestar. Sabe que hay limitaciones sociales, tiene noción de las reglas de lo que se puede y no se debe hacer.
Se adapta a las obligaciones cotidianas sin dificultad. Es responsable, y se le puede encomendar encargos que exijan más tiempo. Comparte sus pertenencias y espera turno. Juega con grupos más numerosos y coopera por mantenerlos, aparecen líderes y se forman las pandillas.
Muestra preferencias por compañeros de su mismo sexo, y le desagradan las actividades que considera propias del sexo opuesto.
Se halla en la etapa del juego socializado, entonces comparte situaciones de juego y materiales. Juega con grupos numerosos, le gusta participar, cooperar y mantener la unidad grupal. Respeta los turnos y exige que los demás hagan lo mismo.
Escucha atento los relatos de sus compañeros y hace preguntas para conocer más detalles de lo sucedido. Se comporta correctamente en los espectáculos públicos. Es capaz de cuidar a diario, animales y plantas. Reconoce su símbolo patrio.
Siente interés por el sexo y la reproducción. Comienza a salir del Complejo de Edipo, y se identifica con el mismo sexo, el niño hace una imitación del padre y la niña de la madre; hacia el otro sexo siente afecto, ternura.
Desidealiza a los padres: entiende que él está excluido de la pareja, que es solamente el hijo.
Aspecto Intelectual
Su lenguaje es fluido y completo, no articula infantilmente. Disfruta de la ridiculez, reacciona ante la palabra y pregunta para informarse. Aumenta su capacidad de atención, hace referencia a lo que observa. Sus juicios y nociones verbales revelan normas de inmadurez en su pensamiento. Ya no tiene la locuacidad de la etapa anterior, habla menos, pero es más ágil para comprender.
Le agrada escuchar la misma lectura incansablemente y mirar libros, intenta leerlos. Puede reconocer letras y localizar palabras conocidas en una página o cartel. Le gustan los cuentos de animales que se comportan como seres humanos. Diferencia lo real de lo fantástico, le encanta la aventura.
Su memoria y su concepto de tiempo permiten que la maestra pueda retomar un relato parcialmente narrado varios días antes y continuarlo de este modo durante un mes, en etapas (por ejemplo: Peter Pan, Pinocho, Daylan Kifki). En este período la maravilla ha sido casi dejada de lado, y sólo la acepta si se le advierte que se le contará un cuento que no es verdad, peor que resultará muy lindo escucharlo. Admite breves incursiones por el reino de la fantasía, es capaz de aislar palabras del contexto y preguntar por su significado. Aprecia la belleza y es capaz de entristecerse por lo que acontece en un relato.
Con el lenguaje se defiende: arremete verbalmente en vez de hacerlo corporalmente. Le gusta transgredir a través de las malas palabras, puede diferenciar la verdad de la mentira. Utiliza el lenguaje gestual.
Su pensamiento es concreto, intuitivo y prelógico. Tiene mucho más organizada la percepción y maneja imágenes de objetos conocidos para hacer clasificaciones, seriaciones con figuras de flores, automóviles, frutas, verduras, etcétera. Esta percepción más organizada llega a poder agrupar formas abstractas por color, tamaño, forma, etcétera. Tiene cierta dificultad para reconocer la izquierda, y la derecha de los objetos que están frente a él; problema que va superando a medida que lo ejercita.
Está desarrollando a noción de tiempo y comienza a interesarse por el reloj. Está ansioso por conocer realidades. Es capaz de planificar, elaborando un proyecto, de llevarlo a cabo ajustándose al mismo, y hasta evaluar sus resultados, pues ya muestra desarrollando su sentido crítico. La realización de las tareas le llevará varios días.
Llega casi a la reversibilidad. Su pensamiento es lógico-matemática, y representacional (en cuanto al lenguaje y a los símbolos). Llega a la seriación, clasificación, tiene noción del concepto de equivalencia. Conoce y diferencia la derecha, tiene definida la propia lateralidad.
Intuición articulada: interiorización de percepciones y movimientos bajo la forma de imágenes representativas.
La figura humana que dibuja es muy completa y los dibujos de animales son reconocibles por los detalles que le agrega.
Reconstruye formas incompletas, dominando trazos curvos y rectos. Clasifica hasta por tres atributos con material concreto, figurativo y de formas abstractas. Realiza seriaciones con material concreto y figurativo, hasta con 10 elementos.
Tiene una clara noción de espacio. Se ubica: atrás, adelante, a la izquierda y a la derecha de él. Luego lo hará con los objetos y personas.
Tiene la posibilidad de correr y saltar en un solo pie, ya controla totalmente sus esfínteres, lo que le permite la independencia. Está bien maduro en el control motor.
Posee gran independencia y habilidad en sus movimientos. Domina el espacio total y parcial. Se desplaza con precisión en diferentes direcciones y con distintos ritmos. Maneja rectas, curvas y diagonales.
Reconoce su esquema corporal y sus articulaciones. La coordinación óculo-manual progresa lo suficiente como para permitirle un intenso dinamismo manual. Puede calcar, recortar, plegar, copiar grafismos (letra imprenta), escribir su nombre. Sus dibujos son ricos y se aproximan a la realidad. Trabaja en forma creativa con pintura, arcilla, bloques. Puede trabajar de acuerdo a un objetivo, y cumplirlo con un producto reconocible.
Es un explorador interesado y capaz de alejarse de la zona en que reside. Evita el peligro que pueden ofrecerle ciertos materiales. Está constreñido al espacio activo y posee una incipiente conciencia del espacio global.
Aspecto Emocional y Social
Es decidido, seguro de sí mismo, independiente en sus necesidades personales, más reservado, demuestra intencionalidad en sus realizaciones. Es serio, reposado, realista. Depende del adulto, pero también compite con él, buscando su error. Le agrada su supervisión y la solicita. Es servicial, afectuoso, comprensivo y conversador. Sus estados de ánimo son pasajeros y se repone rápidamente si éstos son malos. Puede controlar más su llanto.
Respeta las normas establecidas por el adulto y por el grupo, y se molesta muchísimo ante cualquier injusticia. Es responsable y le gusta cooperar, siendo capaz de cumplir con encargos que demandan tiempo y responsabilidad. Es perseverante, le gusta terminar lo que ha comenzado, en el mismo día, o en jornadas subsiguientes. Reconoce lo propio y lo ajeno, posee mucho amor propio y se esfuerza para superar dificultades; resuelve sin enojos, sus propias situaciones. Es capaz de ceder su lugar y de esperar su turno sin molestar. Sabe que hay limitaciones sociales, tiene noción de las reglas de lo que se puede y no se debe hacer.
Se adapta a las obligaciones cotidianas sin dificultad. Es responsable, y se le puede encomendar encargos que exijan más tiempo. Comparte sus pertenencias y espera turno. Juega con grupos más numerosos y coopera por mantenerlos, aparecen líderes y se forman las pandillas.
Muestra preferencias por compañeros de su mismo sexo, y le desagradan las actividades que considera propias del sexo opuesto.
Se halla en la etapa del juego socializado, entonces comparte situaciones de juego y materiales. Juega con grupos numerosos, le gusta participar, cooperar y mantener la unidad grupal. Respeta los turnos y exige que los demás hagan lo mismo.
Escucha atento los relatos de sus compañeros y hace preguntas para conocer más detalles de lo sucedido. Se comporta correctamente en los espectáculos públicos. Es capaz de cuidar a diario, animales y plantas. Reconoce su símbolo patrio.
Siente interés por el sexo y la reproducción. Comienza a salir del Complejo de Edipo, y se identifica con el mismo sexo, el niño hace una imitación del padre y la niña de la madre; hacia el otro sexo siente afecto, ternura.
Desidealiza a los padres: entiende que él está excluido de la pareja, que es solamente el hijo.
Aspecto Intelectual
Su lenguaje es fluido y completo, no articula infantilmente. Disfruta de la ridiculez, reacciona ante la palabra y pregunta para informarse. Aumenta su capacidad de atención, hace referencia a lo que observa. Sus juicios y nociones verbales revelan normas de inmadurez en su pensamiento. Ya no tiene la locuacidad de la etapa anterior, habla menos, pero es más ágil para comprender.
Le agrada escuchar la misma lectura incansablemente y mirar libros, intenta leerlos. Puede reconocer letras y localizar palabras conocidas en una página o cartel. Le gustan los cuentos de animales que se comportan como seres humanos. Diferencia lo real de lo fantástico, le encanta la aventura.
Su memoria y su concepto de tiempo permiten que la maestra pueda retomar un relato parcialmente narrado varios días antes y continuarlo de este modo durante un mes, en etapas (por ejemplo: Peter Pan, Pinocho, Daylan Kifki). En este período la maravilla ha sido casi dejada de lado, y sólo la acepta si se le advierte que se le contará un cuento que no es verdad, peor que resultará muy lindo escucharlo. Admite breves incursiones por el reino de la fantasía, es capaz de aislar palabras del contexto y preguntar por su significado. Aprecia la belleza y es capaz de entristecerse por lo que acontece en un relato.
Con el lenguaje se defiende: arremete verbalmente en vez de hacerlo corporalmente. Le gusta transgredir a través de las malas palabras, puede diferenciar la verdad de la mentira. Utiliza el lenguaje gestual.
Su pensamiento es concreto, intuitivo y prelógico. Tiene mucho más organizada la percepción y maneja imágenes de objetos conocidos para hacer clasificaciones, seriaciones con figuras de flores, automóviles, frutas, verduras, etcétera. Esta percepción más organizada llega a poder agrupar formas abstractas por color, tamaño, forma, etcétera. Tiene cierta dificultad para reconocer la izquierda, y la derecha de los objetos que están frente a él; problema que va superando a medida que lo ejercita.
Está desarrollando a noción de tiempo y comienza a interesarse por el reloj. Está ansioso por conocer realidades. Es capaz de planificar, elaborando un proyecto, de llevarlo a cabo ajustándose al mismo, y hasta evaluar sus resultados, pues ya muestra desarrollando su sentido crítico. La realización de las tareas le llevará varios días.
Llega casi a la reversibilidad. Su pensamiento es lógico-matemática, y representacional (en cuanto al lenguaje y a los símbolos). Llega a la seriación, clasificación, tiene noción del concepto de equivalencia. Conoce y diferencia la derecha, tiene definida la propia lateralidad.
Intuición articulada: interiorización de percepciones y movimientos bajo la forma de imágenes representativas.
La figura humana que dibuja es muy completa y los dibujos de animales son reconocibles por los detalles que le agrega.
Reconstruye formas incompletas, dominando trazos curvos y rectos. Clasifica hasta por tres atributos con material concreto, figurativo y de formas abstractas. Realiza seriaciones con material concreto y figurativo, hasta con 10 elementos.
Tiene una clara noción de espacio. Se ubica: atrás, adelante, a la izquierda y a la derecha de él. Luego lo hará con los objetos y personas.
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